lunes, enero 21, 2008

EL AGUA.

Tiene la lluvia la cualidad de fastidiarte el dia. No te deja moverte con la libertad que el verano y el sol te permite, y te hace recogerte en casa a la espera de tiempos mejores. El espiritu no es el mismo. Parece todo mas apagado, incluso tu mismo.
Pero si tiene algo la naturaleza es la capacidad de sorprender. Mirando la prevision pensaba que este fin de semana en Killarney National Park (Kerry), iba a estar cojonudo pero la pena que iban a caer chuzos de punto.

Dejamos el coche, entramos en el parque nacional, y lo primero embarrarse y mojarse. Malas sensaciones. A los cinco minutos, se han tornado en buenas. Te da igual ir mojado, porque es acojonante lo que el agua es capaz de hacer en la montaña. Los lagos crecidisimos, desbordados, invadiendo el espacio en principio reservado al bosque. Los arboles, parecen dar la batalla por perdida y se dejan rodear. Algunos pierden pie, o tronco, y se derrumban en el agua. Otros se mantienen a duras penas. Los mas viejos, parecen los mas adaptados, no es la primera vez que les pasa, y resisten tiesos la invasion. El camino cubierto por el agua y lodo, en algun momento no puedes seguir. Se acabo, hay que darse la vuelta.
Si te vas a la parte alta de la montaña te encuentras que desde todas las cimas, caen torrentes preciosos que forman cataratas, pequeñas o grandes, y el agua, como si necesitara reagruparse va toda a formar una laguna, con fecha de caducidad, cuando este sin llover una semana: o algo mas grande y duradero, como un rio que baja con mas o menos fuerza dependiendo tambien de la epoca del año.

La carretera es para coches porque lo dice el mapa. Vas con cuidado de las piscinas que con dos ruedas o con las cuatro vas pisando, y expulsando hacia los lados mantas de agua, poco importa que la ultima vez que la asfaltaran fuera hace lustros. Cruzas y recruzas los rio por puentes de piedra poco mas anchos que el coche. Cambios de rasante en primera, porque literalmente no ves que hay detras y puede ser que entres en un charco pero no salgas, o te encuentras una curva ciega que si vas deprisa le dices adios con la mano y te vas colina abajo por el sitio equivocado.
Es brutal. Hay pasos entre montañas donde el ruido de todos los torrentes y cascadas juntos es, de verdad, ensordecedor. Y los hay tan cerrados que, si ya de por si el dia es oscuro, se hace mucho mas porque el sitio es pequeño y la pendiente a los lados casi vertical.

Cuando la naturaleza despierta y hace de las suyas, es decir, lo que le da la gana, lo mejor es acercarse a mirar, sin molestar, en silencio, rindiendo pleitesia y con respeto. Te sientes pequeño y descubres que perteneces a ella, que no eres mas que nada, que intentar destruirla es como apuñalar a tu madre.

2 comentarios:

Acido_Cinico dijo...

Mola...

Anónimo dijo...

Pareció una aventurilla de puta madre, una pena no haber estado para calarnos juntos,Signed: grandfather Pablo, un abrazo!!!