lunes, mayo 26, 2008

ESA PEQUEÑA CHE GUEVARA.

Apariencia y maneras de inocencia. A las primeras se le ve un corazon de un calibre que todos lo quisieramos. Esta llena de vida, de sonrisas, de ojazos brillantes y de un incontenible impaciencia por conocer. Es compañera de viaje, siempre contare con ella alla donde vaya. Y es mi prima y siempre lo sera. Es Belen. Mañana se va de Irlanda. Lo que me ha aportado no se describe con palabras, ni escribiendo un post.
Mi discreta, oculta Che Guevara.

6 comentarios:

Acido_Cinico dijo...

Sospecho que esa denominación lleva implícito el duelo porque los revolucionarios al estilo Che y su imagen murieron todos el 1 de enero de 2000...
Hoy en día es imposible que surgiera algo igual, mira cómo desapareció (sin pasión ni apoteosis) el "Subcomandante" Marcos...

Anónimo dijo...

Dede Madrí mucha suerte para "cenicienta" de parte de Pablo ´Grandma´

BELENCHU dijo...

Te he dicho alguna vez todo lo que te quiero mi niño? bueno pos solo decirte que te voy a echar mucho de menos y que ese abrazo que todavia espero de despedida me lo des bien pronto:). mil besos.

BELENCHU dijo...

PARA MI, PARA SEGUIR VOLANDO, PARA TODOS LOS QUE VUELAN EN EL DIA A DIA:

El viajero está en una fiesta de San Juan, con tenderetes, tiro al blanco, comida casera.
De repente, un payaso comienza a imitar todos sus gestos. la gente se ríe, y él también se divierte. Al final, lo invita a tomar un café.
-Comprométete con la vida- dice el payaso.
Si estás vivo, tienes que sacudir los brazos, saltar, hacer ruido, reír y hablar con la gente, porque la vida es exactamente lo opuesto a la muerte.
"Morir es quedarse siempre en la misma posición. Si estás muy quieto, no vives."

BELENCHU dijo...

Un explorador blanco, ansioso por llegar cuanto antes a su destino en el corazón de Africa, ofreció una paga extra a sus porteadores para que anduviesen más de prisa. Durante varios días, los porteadores apuraron el paso.
Una tarde, sin embargo, se sentaron todos en el suelo y posaron la carga, negándose a continuar. Por más dinero que les ofreciese, los indígenas no se movían. Finalmente, cuando el explorador pidió una explicación para aquel comportamiento, obtuvo la siguiente respuesta:

-Hemos andado demasiado de prisa, y ya no sabemos ni lo que estamos haciendo. Tenemos que esperar a que nuestras almas nos alcancen.

BELENCHU dijo...

Muchas gracias Pablo (ya os ire contando...), que tal va todo por Madrid?
muchos besazos